Según la visión del universo de Aristóteles, todas las cosas giran en torno a la Tierra.
Por tanto, sólo puede existir un centro de rotación.
Desafortunadamente, Galileo descubrió varios problemas a esta afirmación. Júpiter, por sí solo, tenía cuatro objetos girando a su alrededor, y estos cuatro objetos, por tanto, no tenían un centro de rotación en torno a la Tierra.
Galileo puso sus observaciones de las lunas de Júpiter en su libro Siderius Nuncius ( El mensajero de las estrellas). Estudió Júpiter a lo largo de un mes y fue capaz de mostrar el movimiento de los satélites en torno a Júpiter. Determinó que los periodos de las cuatro lunas eran 42 horas, 3,5 días, 7 días y 16 días.El libro causó una gran conmoción en el ambiente científico de su época.
Por Rocío y Elisabeth 4ª
http://antoniotejero.blogspot.com/2005/11/el-mensajero-de-las-estrellas.html
miércoles, 11 de marzo de 2009
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1 comentario:
Perfecto.
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